¿¿ Para qué me curaste cuando estaba herido......

.....si hoy me dejas de nuevo el corazón partido??

Esto es lo que se están preguntando Jose y Hildo, estos dos guapetones que fueron adoptados cuando eran unos pequeñajos, y a los que muchos meses más tarde, han traido de vuelta al albergue. Me dan una penita, pufff... Acostumbrados a una casita, a ser lor reyes de la casa, de repente se sienten muy desorientados y muy mal, pobrecicos. Echan mucho de menos a sus amos, a los que seguro que adoraban y en los que confiaban mucho, y ahora, de repente, zas, se sienten con el corazón herido. Cuando estaban solos, me he acercado a ellos para que se desahogaran un poco y para darles consuelo, y ¡como me han llorado!, es que son todavía dos jovenzuelos que no pueden asumir la dura realidad que les ha tocado vivir, la que nos ha tocado vivir a todos los que aquí estamos. Ya les he dicho que lloren en mi hombro todo lo que haga falta, que seguro que como son tan guapos, muy pronto encontraran otro hogar, y que esta vez será para siempre. Ojalá sea así, me dan una penicaaaa......